10 nov 2016

Sobre el exorcismo.


El exorcismo es una antigua y particular forma de oración que hace un ministro ordenado de la Iglesia, en nombre de Jesucristo y por el poder que Jesucristo ha otorgado a su Iglesia para liberar del poder de Satanás, demonio. Por lo tanto no es oración personal sino de la Iglesia.

El Catecismo #1673: "Cuando la Iglesia pide públicamente y con autoridad, en nombre de Jesucristo, que una persona o un objeto sea protegido contra las asechanzas del maligno y sustraída a su dominio, se habla de exorcismo. Jesús lo practicó (Mc 1,25 ss), de El tiene la Iglesia el poder y el oficio de exorcizar". 
 
Los exorcismos pueden ser simples o solemnes.

El exorcismo simple se reza en el rito del bautismo.
El exorcismo solemne es un sacramental que sólo puede ser válidamente celebrado por un sacerdote con el permiso del Ordinario (obispo) del lugar. El obispo da permiso al sacerdote para cada caso o puede, con el permiso de la Santa Sede, formalmente otorgar a un sacerdote el oficio de exorcista. En ese caso el sacerdote está facultado para exorcizar y no necesita un permiso particular para cada caso.

Solo el exorcista con la debida licencia puede verificar la verdadera posesión diabólica. Es un proceso difícil en el que se deben descartar causas naturales. 

Según el Padre Amorth, exorcista de Roma, el poder de expulsar demonios que Jesús confirió a todos los creyentes conserva toda validez. Es un poder general basado en la fe y en la oración, y puede ser ejercido por individuos o comunidades sin ninguna autorización. Sin embargo, en este caso, se trata de plegarias de liberación, y no se deben llamar exorcismos

Sólo al sacerdote autorizado, además de al obispo exorcizante, corresponde el nombre de exorcista.  "Habla un Exorcista", Planeta + Testimonio, pag. 43-44.
En algunas diócesis hay laicos que han sido preparados para el ministerio de liberación (no exorcismo) bajo la dirección de un sacerdote. La liberación es oración para liberar de la opresión del demonio pero sin utilizar el rito de exorcismo. Nadie debe ejercer este ministerio sin autorización de la Iglesia.

Jesús vino a liberarnos del poder de Satanás y darnos la gracia de ser hijos de Dios.
Jesús le increpó y el demonio salió de él; y quedó sano el niño desde aquel momento. Mateo 17,18
Jesús impartió su poder liberador a sus discípulos para que ellos y sus sucesores continuaran la misión de liberación y exorcismo en su nombre. Por lo tanto el protagonista en el exorcismo es Dios a través de su ministro y no el demonio.
El les dijo: «Yo veía a Satanás caer del cielo como un rayo.  Mirad, os he dado el poder de pisar sobre serpientes y escorpiones, y sobre todo poder del enemigo, y nada os podrá hacer daño»  Lucas 10,18-19
El exorcista ante todo busca llevar la persona atribulada a un encuentro con Jesús. Para ello es necesario apertura a los canales de gracia en la Iglesia: la confesión, la eucaristía, la meditación de la Palabra, la comunidad, la catequesis...  Es un camino de fe en al que se invita también a la familia Cf. Mc 9, 14-29.

Necesidad de diagnóstico y la prudencia

El Padre Gramolazzo comenta:


Actualmente muchos viven una fe supersticiosa o de superstición y muchos tienden a no hacerse responsables, no saben afrontar el sufrimiento y atribuyen todo trastorno físico o espiritual a la acción del demonio. Pero frecuentemente el remedio es una verdadera y sincera confesión. Cuando en cambio se percibe aversión a lo sagrado, enfermedades desconocidas o incluso síntomas difíciles de identificar, es posible que sea necesario el exorcismo. La presencia demoníaca de cualquier forma hay que diagnosticarla en cada caso. En cambio debería haber más dedicación a la ascesis, a la oración, a la penitencia. La mentalidad popular ha exagerado los poderes de Satanás, que son los de un ángel común.


En la vida diaria para defenderse del mal basta con ser coherentes con el Evangelio, no tener miedo de testimoniar la propia fe y cuidar la propia relación con Dios. A veces es Dios mismo quien permite que algunos sean vejados u obsesionados; piénsese en algunos santos. Pero en estos casos nos hallamos ante planes divinos para nosotros impenetrables.

Juan Pablo II recuerda la importancia del exorcismo El Padre Amorth, exorcista oficial de Roma, se lamenta de que por tres siglos, los exorcismos fueron casi abandonados por la Iglesia. Juan Pablo II, ha vuelto a recordar la importancia de estos. Durante la audiencia pública del 3 de Junio de 1998, El Papa Juan Pablo II habló de los deberes del exorcista y en 1999 se publicó el rito de exorcismo que remplaza al del 1614.  El Papa, según el Padre Amorth, ha hecho al menos dos exorcismos durante su pontificado. El primer caso fue en abril del 1982, el segundo durante el año jubilar. Ambos casos se tratan de personas no identificadas que manifestaron señales de posesión durante una audiencia con el Papa. El mas tarde las rezó las oraciones del exorcismo por ellas en privado.

El Exorcismo, según el Cardenal Medina La Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, presentó el nuevo rito de exorcismos en enero del 1999. El prefecto de dicha congregación, el Cardenal Medina, enseñó en dicha ocasión los siguientes puntos (todas las citas son del mismo cardenal o según indicado)
Según el Cardenal Jorge Medina Estevez, el nuevo ritual es una edición actualizada de la versión del texto de 1614. Añadió que las oraciones oficiales reconocían la realidad del demonio "en su forma substancial, como el maligno, el enemigo de Dios".

blue star.gif (243 bytes)¿QUÉ ES EL EXORCISMO?: "El exorcismo es una antigua y particular forma de oración que la Iglesia emplea contra el poder del diablo".
Catecismo #1673:
"Cuando la Iglesia pide públicamente y con autoridad, en nombre de Jesucristo, que una persona o un objeto sea protegido contra las asechanzas del maligno y sustraída a su dominio, se habla de exorcismo. Jesús lo practicó (cf. Mc 1:25s), de El tiene la Iglesia el poder y el oficio de exorcizar. (cf. Mc 3:15; 6:7.13; 16:17). En forma simple, el exorcismo tiene lugar en la celebración del Bautismo. El exorcismo solemne sólo puede ser practicado por un sacerdote y con el permiso del obispo. En estos casos es preciso proceder con prudencia, observando estrictamente las reglas establecidas por la Iglesia. El exorcismo intenta expulsar a los demonios o liberar del dominio demoníaco gracias a la autoridad espiritual que Jesús ha confiado a su Iglesia."
"Muy distinto es el caso de las enfermedades, sobre todo psíquicas, cuyo cuidado pertenece a la ciencia médica. Por tanto, es importante asegurarse, antes de celebrar el exorcismo, de que se trata de una presencia del Maligno y no de una enfermedad." (cf. CIC can. 1172).
En que se fundamenta: El exorcismo tiene como punto de partida la fe de la Iglesia, según la cual existen Satanás y los otros espíritus malignos. La doctrina católica nos enseña que los demonios son ángeles caídos a causa de sus pecados, que son seres espirituales de gran inteligencia y poder".
 
¿Por qué hace falta?: La capacidad del hombre de acoger a Dios "es ofuscada por el pecado, y a veces el mal ocupa el puesto en el que Dios quiere vivir. Por eso, Jesucristo ha venido a liberar al hombre del dominio del mal y del pecado. (...) Jesucristo expulsaba los demonios y liberaba a los hombres de las posesiones de los espíritus malignos para hacerse espacio en el hombre".

¿Cuánto poder tiene Satanás? "El poder de Satanás no es infinito", sin embargo el que Dios permita que seamos tentados "es un gran misterio".
 
¿Cómo nos influencia el demonio? "El influjo nefasto del demonio y de sus secuaces es habitualmente ejercitado por medio del engaño, la mentira y la confusión. Así como Jesús es la Verdad, el diablo es el mentiroso por excelencia. Desde siempre, desde el inicio, la mentira ha sido su estrategia preferida".
 
¿Ha cambiado la doctrina de la Iglesia sobre el exorcismo? No ha cambiado. Solo han habido algunos cambios en el lenguaje del rito. "Entre el rito anterior y el nuevo hay una gran continuidad; no existe un cambio radical. El lenguaje es más sobrio; hay menos adjetivos, pero la expresión de la fe en el poder de Dios para expulsar al demonio es la misma en ambos casos".
 
        Criterios para discernir posesión diabólica según el nuevo ritual del exorcismo.
La principal es:
-Aversión vehemente hacia Dios, la Virgen, los Santos, la cruz y las imágenes sagradas.
Junto con esta pueden darse otros fenómenos que por si solos podrían ser don de Dios pero en el caso de posesión se manifiestan para el mal:
-El hablar con muchas palabras de lenguas desconocidas o entenderlas.
-Hacer presentes cosas distantes o escondidas.
-Demostrar más fuerzas de lo normal.
¿Puede el demonio tener influencia sobre lugares, objetos y personas? Si. Esta realidad se reconoce en el ritual de exorcismos.

¿Hay diferentes formas de influencia demoníaca además de la posesión? Si. En el presente ritual se encuentran el rito el exorcismo propiamente dicho y las oraciones que hay que recitar públicamente cuando se juzga prudentemente que existe una influencia de Satanás sobre lugares, objetos o personas, sin llegar a la fase de una posesión verdadera y propia. Además, existe una serie de oraciones que los fieles deben rezar privadamente cuando tienen fundadas sospechas de que son sometidos a influencias diabólicas.
 
¿Quién puede practicar el exorcismo? En la pregunta anterior vimos que el nuevo ritual contiene oraciones que los fieles pueden rezar cuando están sometidos a influencias diabólicas. Sin embargo, "Para practicar el exorcismo es necesaria la autorización del obispo diocesano, que puede ser concedida para un caso específico o de un modo general y permanente al sacerdote que ejercita el ministerio de exorcista en la diócesis".

7 nov 2016

Sacerdote exorcista Gary Tomas

                                              P. Gary Thomas

CALIFORNIA, 21 Oct. 16 /-

La revista Cosmopolitan, dirigida al público femenino y que con frecuencia promueve una imagen frívola de la sexualidad, publicó el 18 de octubre una entrevista al sacerdote exorcista P. Gary Thomas, quien dijo aceptar entrevistas no por fama, sino “para que se abran los ojos a las realidades espirituales”.

El P. Gary es un exorcista que sirve en la diócesis de San José en Estados Unidos, cuya vida y labor permitió que se escribiera el libro que después se convirtió en película: "The Rite"(El Rito). El sacerdote ha atendido más de 60 casos de actividad demoníaca en más de una década.

"Algo que piensan erróneamente las personas es que Satanás no existe. Satanás sí existe y es por eso que Jesucristo vino. No estoy tratando de evangelizar, pero es por eso que doy entrevistas. Doy entrevistas porque hay charlatanes que mienten al decir que ‘limpiarán su casa’. También hay otras personas que sí lo pueden hacer, porque tienen un don, sin embargo optaron por utilizarlo del lado oscuro”, dijo el P. Thomas en el artículo titulado What It's Really Like to Be an Exorcist.

"Jesús no vino solo para ser un buen tipo. Su muerte y resurrección venció a Satanás. Satanás no es una metáfora. Satanás es real. A él le gustaría que usted crea que no existe y ese es su mayor engaño. La gente tiene que darse cuenta de que no somos los dueños de nuestro propio destino. Tenemos que ponernos a disposición de Dios", agregó.

El presbítero también explicó que la Iglesia siempre ha realizado exorcismos y es falso si alguien dice lo contrario.

“En el 2004, el Papa San Juan Pablo II emitió un mandato diciendo a todos los obispos del mundo que seleccionen y entrenen a un sacerdote como exorcista. Esto se originó por la creciente actividad oculta que ya ha alcanzado proporciones epidémicas”.

Sobre la actividad oculta, el exorcista aseguró que se refiere a todas las clases de paganismo: “la ouija (que es un instrumento de magia, no un juguete), las cartas del tarot, lectura de manos, sesiones con brujas, meditaciones como el Reiki o el uso del yoga”.

“No es ningún secreto que nuestra sociedad tiene hambre de espiritualidad. El problema es que las personas buscan en todos los lugares equivocados”, acotó.

Aseguró que para muchas personas “el cristianismo ya no es relevante, por lo que constituyen su propia moralidad y su manera de vivir”.

Lamentablemente, continuó el sacerdote, “muchas personas buscan lo que se denomina adivinación, es decir, formas artificiales de descubrir a Dios. Los hijos de Israel en el Antiguo Testamento hicieron esto y experimentaron grandes calamidades. Lo mismo está sucediendo en nuestra cultura actual” que “se está haciendo cada vez más pagana”.

“Hay una organización en los Estados Unidos llamado el Templo Satánico, que tiene toda una jerarquía. Ellos afirman no creer en Satanás (yo no lo creo) pero en realidad se adhieren a un tipo de secularismo que percibe a la religión como supersticiosa y opresiva”.

Ahora, explicó el sacerdote, estos grupos satánicos “están tratando de establecer clubes organizados dentro de las escuelas públicas donde también hay clubes cristianos. Organizan una misa negra todos los años, lo que me parece absolutamente atroz, porque estos cultos significan una profanación de la Eucaristía”.

Es temporada de caza de los cristianos, no hay duda de eso, en mi humilde opinión”, aseguró el exorcista.

Por otro lado, el presbítero explicó que reconocer la diferencia entre una persona poseída y la que lucha contra una enfermedad mental es parte vital del ministerio del exorcismo.
“Ayer, recibí cinco llamadas telefónicas. Obtenemos varias solicitudes a la semana para realizar el rito del exorcismo, inclusive de fuera de nuestra diócesis, y al final tratamos de reorientarlas a sus respectivas localidades. Yo no hago nada por mí mismo. Tengo un equipo de expertos médicos conformado por un psicólogo clínico, un psiquiatra y un médico”.

“También tengo un equipo de oración que hace todos los discernimientos. Cada persona que solicita un exorcismo es evaluada. Sólo se termina haciendo un exorcismo formal cuando todo lo demás ha fallado”, resaltó.

Finalmente el P. Thomas explicó lo que considera los "seis signos clásicos" para que un sacerdote determine que alguien está poseído:

1) Aversión a lo sagrado, como el Santísimo Sacramento o un crucifijo
2) Hablar en un idioma que la persona no conoce
3) Exhibición excesiva de fuerza
4) Conocimiento de las cosas ocultas
5) Expulsar espuma por la boca
6) Movimientos incontrolados por la persona en brazos y piernas.

4 nov 2016

Oración & satanismo

El satanismo aumenta «porque se reza poco» y porque «muchos sacerdotes no creen en el demonio»

 
El exorcista Ermes Macchioni, de la diócesis de Reggio Emilia  
 
"El satanismo está aumentando. ¿La razón? Hemos abandonado la fe, porque se reza poco y a veces mal”. Lo dice en esta entrevista con el diario La Fede Quotidiana el exorcista Ermes Macchioni, de la diócesis de Reggio Emilia, en Italia, quien da la voz de alarma y quien hace una llamada a estar vigilantes. El periodista Bruno Volpe también ha entrevistado a otro exorcista, Elio Nicli, el cual denuncia que gran parte del clero no cree en el demonio.

- Don Ermes, el cardenal Burke convocó a una oración penitencial ante una manifestación satanista en los EE.UU. ¿Podemos hablar de un aumento del satanismo?
El satanismo, con las malas consecuencias que esto conlleva, en realidad está en aumento, lo cual debería conducir a un examen de conciencia.

- Pero, ¿por qué?
Cada vez más, parece que hemos perdido la fe. La sociedad vive ahora de forma pagana y podemos decir que hay un esfuerzo continuo y extendido por eliminar a Dios de la vida pública y sustituirlo por el "yo". El hombre de hoy se siente autorreferencial y piensa que no necesita a Dios. Todo esto conduce a formas de idolatría como el dinero, el éxito, el poder cueste lo que cueste, el sexo desenfrenado y en contra del proyecto de Dios, la pornografía… En otras palabras se ora poco y mal.

- ¿Por qué poco y mal?
Muchas personas que se consideran cristianas no rezan, y la oración es la medicina fundamental del alma en contra de Satanás. Pienso en la recitación del Rosario, que es un arma poderosa y beneficiosa. En cuanto al hecho de orar mal, observo que se reza con adaptaciones personales a la oración, cada uno agrega, quita y pone cosas sin tener debidamente en cuenta la rica la enseñanza de la Iglesia y su tradición.

- Un obispo polaco, monseñor Pieronek, sostiene que si el Islam se extiende en Europa es porque el continente vive una fe, por decirlo de una manera, menos cálida…
Tiene toda la razón. Hoy en día, la fe cristiana en muchos lugares es tibia. El mayor problema es el secularismo galopante asociado con el relativismo ético y cultural. Todo esto, los musulmanes han entendido bien.

- Por cierto, ¿podemos definir el ISIS satánico?
Todo lo que va en contra del plan de Dios viene del diablo, y él lo inspira. ISIS mata en nombre de un dios, esto es una locura y va en contra del verdadero Dios. Usted sabe que todo lo que va en contra de Dios viene de Satanás.

- ¿Y la Virgen María?
La Santísima Virgen es un elemento disuasorio formidable contra las asechanzas del diablo. El Rosario lo pone en fuga a la hora de meditarlo y rezarlo. Todos los cristianos debemos hacer un mayor uso de esta bella oración.

- ¿Cuáles son los santos... más temidos por Satanás?
Además de la Virgen, el Padre Pío y san Gema Galgani, además de san Benito.

El demonio se esconde y no se revela
Bruno Volpe sigue haciéndose eco de lo que explican los exorcistas: "El mal, el diablo, el maligno, no han desaparecido; siempre han existido y hoy en día, sin dogmas, con los ateos, con cada vez menos fe, Satanás está cada vez más presente y fuerte. Su secreto, ¿lo sabe usted?: fingir que no existe. Se esconde, no se revela. Así que nadie cree que existe. Pero él trabaja y actúa cada vez en más personas, para llevarse sus almas, para que no vayan al cielo", explica el exorcista Elio Nicli.

                               Elio Nicli
Nicli es un sacerdote octogenario que ha visto mucho y de todo durante los 20 años que ha realizado exorcismos en la capilla del hospital de Tolmezzo, en Udine, Italia. También explica que a lo largo de estos años, "los casos de posesión real que he conocido no han sido más de una docena. Muchos más numerosos han sido los casos de infestación, es decir, el primer paso del diablo, cuando llega con ruidos extraños en la casa, con un olor extraño; cuando oímos que alguien entra en nuestra casa y no hay nadie”.

La siguiente etapa en la conquista del alma por parte del demonio, explica el sacerdote italiano, “es la obsesión: pensamientos obsesivos, como un sentimiento de persecución, o como el miedo que nunca te deja de una traición del marido o esposa...”.

“Luego –explica Nicli- está otro tipo de acoso del diablo: el dolor físico, cuando el cuerpo sufre. Y, entonces, el último paso, que es la posesión verdadera y propia, cuando el demonio se posesiona literalmente de una persona que luego puede llegar a tener una fuerza sobrehumana o hablar más idiomas, nunca idiomas conocidos, sino idiomas que nunca se han escuchado, idiomas antiguos”. Esta es la etapa más compleja a tratar según señala el exorcista, pero se puede tratar “con mucha fe, con una buena preparación y con la ayuda y la voluntad del Señor”.

"La mayoría de los sacerdotes ya no cree que el diablo"
El exorcista reiteró que "existe el diablo: así como existe el Bien. Solo que la mayoría de los sacerdotes de la Iglesia Católica ya no cree en el demonio. Ya no se bendicen las casas, no oramos, las imágenes sagradas han desaparecido de nuestros hogares. Parece cosa pasada de moda, una locura. Pero no lo es. Hemos caído en el engaño del diablo, que actualmente se encuentra fuera de control, cada vez más en esta sociedad sin valores, sin creencias, sin referencias".

Por último, el padre Nicli da un consejo a los jóvenes a través de la periodista: "Manténgase alejado de las sectas. Seguí a una chica de Pordenone que estaba dentro de estos círculos maléficos, que existen y que son potentísimos. ¡Ay! Cuánto ha pasado. Lo sé, pero al final lo ha conseguido y ha podido salir".